Terminemos lo que empezamos

El 15 de Mayo de 2011 marca un antes y un después en el papel de los ciudadanos en la política. A partir de aquel día, y de forma masiva e inapelable, los ciudadanos dejamos claro que la política dejaba de ser un monopolio de los partidos tradicionales que llevaban décadas repartiéndose en el poder y monopolizando la participación política sin ningún control por parte de los ciudadanos.

A tres años del 15M. Es hora de acabar lo que empezamos.

El 15M surgió transversal y en seguida se puso a trabajar sobre unos mínimos pragmáticos a conquistar, comunes a todo el mundo.

El 15M ha aportado un poderoso pragmatismo a la acción política, ha roto con el inmovilismo y el estancamiento dogmático de muchos movimientos sociales y ha puesto por delante la búsqueda constructiva de soluciones.

Esto ha permitido que tras aquella primera oleada que lo inundó todo, la ciudadanía en lugar de replegarse, supiese escalar muy hábilmente las reivindicaciones concretas que se desprendían de aquel clamor, para obtener victorias concretas en una segunda oleada que trajo una generación de nuevos grupos como 15MpaRato, Auditoría de Deuda, las Mareas Ciudadanas o la consolidación de la PAH.

Muchos de entre los iniciadores del proyecto de la Red Ciudadana Partido X estuvimos en la preparación de la manifestación del 15M o en las comisiones de trabajo de las plazas y, posteriormente, participamos en diversos otros grupos de la segunda oleada; concretamente la mayoría de los desarrolladores del método de Partido X han sido también iniciadores de 15MpaRato, la querella ciudadana que ha llevado Rodrigo Rato y los 33 de Bankia al banquillo.

La Red Ciudadana Partido X es parte de esta oleada de procesos que deciden un frente a atacar y lo atacan con rigor y exhaustivamente.

La Red Ciudadana Partido X trabaja cómo conseguir que todo el trabajo de los ciudadanos de estos años entre en las instituciones.

El debate sobre lo electoral y el 15M está presente en todos los espacios del ecosistema que nació hace más de tres años.

Lo que nació el 15M seguirá evolucionando siempre. Y cuando lo podamos ver dentro de muchos años recordaremos el 15M de 2011 como una fecha que marcó un antes y un después. Seguir aferrados a lo mismo y repitiendo lo mismo que dio tan buen resultado, sería la garantía de fracasar. Ahora es el momento de avanzar hacia adelante.

Unos hablan del 15M como un dogma con unas reglas rígidas.

Nosotros, y como nosotros muchos más, lo habitamos como el fin del dogmatismo y el comienzo de una política ciudadana tolerante, eficaz , que busca soluciones y utiliza las formas más idóneas para llevarlas a cabo sin nunca quedarse abigarradas en ellas, sino adoptando la forma que mejor sirve a cada momento con el único objetivo de acabar con los privilegios y construir una democracia real con soluciones reales a problemas reales.

Es hora de terminar lo que los ciudadanos empezamos hace tres años. Es hora de hacer un 15M en el espacio electoral.